RECUERDO Y TRADICIÓN
También el Sacro-Monte tiene una flor para nuestra excelsa y amadísima Madre la Virgen de las Angustias.
Entre los nobilísimos ejemplos que en el decurso de su santa vida nos dejó el sabio y espléndido fundador de esta Abadía, aparece su devoción y celo en promover el culto de la Reina del Cielo, bajo el misterio de sus Angustias, mandando hacer la parroquia que va para tres siglos lleva este título, en el lugar en que estaba la ermita que ordenó edificar la Reina Católica. Y en confirmación de aquel amor mariano, dispuso que la primera capilla de las Santas Cuevas, se dedicase á los Dolores de la Santísima Virgen, y que todos los sábados del año hubiese Misa y Salve cantadas en honor de la Señora.
Aquel celo prendió en los corazones de los Canónigos de esta Colegiata, y se ha propagado de generación en generación, como perfume imperecedero, como corriente cristalina y perpetua, como astro que no ha experimentado eclipse, y unido al fervor religioso del pueblo granadino, ha producido el entusiasmo por la Celestial Patrona que custodia nuestra vida y los destinos de esta ciudad.
Y como todo ha sido hecho en el mundo para Jesucristo y para María, cielos, astros, mundo, naturaleza, hombre y sociedad, todo es preciso que subsista y se mueva para la gloria de la Virgen de las Angustias, que tiene un altar en cada corazón de los hijos de esta tierra, que es para nosotros el arca de la alianza, en la peregrinación por este destierro, y ha de ser nuestro consuelo y fortaleza en la hora de la muerte.
José de Ramos López. Abad.
Granada, 14 de Septiembre de 1894
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MÍSTICO RAMILLETE
Vida de D. Pedro de Castro Vaca y Quiñones, Fundador de la Insigne Iglesia Colegial
del Sacro-Monte Ilipulitano. Por el Doctor D. Diego Nicolás de Heredia Barnuevo.
Año de 1604
No puede negar Granada lo mucho que debió á la actividad, celo y piedad de su V. Prelado en la determinación que tomó este año de erigir en Parroquia la antigua Ermita donde se veneraba como sacro paladion y tutelar númen de Granada, el en todo mila-groso simulacro de Nuestra Señora de las Angustias. Para entender esta noticia como merece su asunto, necesita la pluma dar (bien que volando) algunos pasos atrás en el hilo de la historia. Júzgase y con razon obligado el Señor Castro á promover los cultos de esta soberana Imágen, pues ella fué la sagrada Pandora que manifestó las inestimables riquezas del sagrado tesoro de Reliquias que se descubrió en el Monte Santo. Leer más
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¡Madre!...
¡Madre! ¡Cuánto tiempo fuí
ingrato para contigo!
¡Ay! el Cielo me es testigo
de cuanto yo te ofendí.
Me alejé dentro de tí,
cual si otro Pródigo fuera
y viví de tal manera
de tu regazo apartado,
que era siervo del pecado
y esclavo del mundo era.
Gocé, sufrí, arrostré
una existencia agitada;
viví una vida mezclada
de incredulidad y fe.
Sin tu guía me enredé
en entrañas aventuras;
viví mucho tiempo a obscuras,
flores y espinas pisando,
tristes deleites gustando,
libando amargas dulzuras.
Pero yo quiero volver
a tu maternal regazo,
roto está el funesto lazo
que me quiere detener.
Otra vez pretendo ser
aquel niño cariñoso
que con afecto piadoso,
a su madre sonreía
y de su madre bebía
néctar puro y generoso.
¿Me aceptarás? ¿quién lo duda?
Que si yo de amor mudé
porque de tí me aparté,
en ti el amor no se muda.
Desde hoy haré guerra cruda
a quien tanto obedecí,
no quiero amar sino a tí.
Dame, Madre idolatrada,
que sea yo para mi amada,
y mi amada para mí.
Juan Alonso Vela, 1915
| A la Virgen de las Angustias dulce panal de cera dolorida, el alma se me encoge estremecida ante tanto dolor. No sospechara Simeón que ser Madre te costara tan grande padecer y tanta herida. Pero estás firme, de dolor transida, tu seno al Hijo con amor ampara. Virgen de las Angustias, granadina, consuelo de esta tierra y de su gente, besar tus níveas manos yo quisiera, y al estar de tu Hijo frente a frente en tu regazo yo permaneciera, sin fin gozando de la paz divina.
Federico Rodríguez Ratia, 2013
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